Depresión en la niñez y adolescencia



Etiología 

Antes de comenzar cabe mencionar que la depresión es un tema muy discutido y muy amplio con lo cual hay diversas perspectivas, aquí explicaremos de forma general un poco de su etiología. 

El desarrollo de la depresión se debe a la interacción de diversos factores, ya que es multifactorial, estos los podemos dividir a grandes rasgos en dos grupos vulnerabilidades biológicas y genéticas e influencias ambientales, (M Rey, Bella-Awusah, Liu, 2015 P. 6). Estos impactan en los niños o adolescentes de diversas maneras.  


Ahora a manera más específica las vulnerabilidades biológicas son las que tiene que ver con las funciones cerebrales, como por ejemplo la alteración del funcionamiento de los neurotransmisores los cuales influyen en los estados del ánimo, o la falta de producción de ciertas hormonas. Mientras las genéticas están en relación a la herencia de ciertos genes que hacen propensa a las personas a padecer esta enfermedad. 


Las influencias ambientales, las vamos a dividir en dos las sociales y las psicológicas en estas se  encuentran las relaciones familiares, el entorno en el que nos desarrollamos, los eventos estresantes, rasgos de la conducta y el estilo cognitivo.  


Teniendo esto podemos ahora si hablar de factores y causas más específicas las cuales pueden  desencadenar un episodio de depresión estas pueden ser: 


0- Casos de depresión en familiares. 

0- Cambios hormonales en la pubertad.   

0- Enfermedades crónicas o de salud graves.  

0- Experiencias de duelo o pérdidas      

0- Eventos estresantes, como cambios muy abruptos. 

0- Problemas escolare tales como el acoso. 

0- Traumas psicológicos o físicos: abuso, acoso, maltrato etc. 

0- Malos estilos de crianza: Frustraciones, abandonos y rechazos psicológicos.  

0- Dificultades para las actividades sociales como: comunicarse e interactuar.  


Diagnósticos y síntomas:

El diagnóstico es una parte clave para cualquier enfermedad, ya que brinda un panorama de esta. En el caso de la depresión no es diferente, este permite definir su tipo, su gravedad y la forma en la que será tratada. Pero en tempranas etapas del desarrollo como lo son la niñez y la adolescencia, este tiene dificultades a la hora de realizarse, ya que muchos de los síntomas centrales o característicos que se presentan en adultos, en los  niños no se ven con tanta facilidad. Por lo que hay que poner suma atención a los síntomas propios de esta etapa donde se verá reflejada. Estos a grandes rasgos serían: conductas antisociales, malhumor e irritación, retraimiento social y dificultades escolares.  


Murray (citado por García y Rodríguez, 1998) explicó que existen 8 grandes grupos de síntomas que pueden señalar la existencia de un episodio de depresión los cuales son: trastorno del sueño, temor a la muerte, retraimiento social, absentismo escolar, quejas somáticas, conducta agresiva y ansiedad general.  


Los síntomas centrales que se ven en los casos de depresión en los niños y adolescentes son un estado de ánimo decaído y la pérdida del interés en actividades que frecuentaba. Pero además de estos existen una gran cantidad de síntomas en los cuales se puede ver reflejada la depresión como lo son:

       

Síntomas centrales: 

0- La irritabilidad o malhumor. 

0- Tristeza frecuente y ganas de llorar. 

0- Anhedonia 


Síntomas asociados:  

0- Problemas de sueño: dificultades para dormir o levantarse. 

0- Pérdida de energía o cansancio. 

0- Aumento o disminución en el apetito  

0- Problemas para concentrarse  

0- Preocupaciones constantes, las cuales ocasionan ansiedad o miedos. 

0- Ideas suicidas.  

0- Pensamientos negativos, criticas muy fuertes a su autoimagen. 

0- Malestares físicos, como dolores de cabeza, mareos, molestias abdominales las cuales no tienen explicación. 

0- Bajo rendimiento escolar. 

0- Pérdida de autoconfianza. 

0- Fracasó en el desarrollo de habilidades sociales.  


Estos son los síntomas que se pueden dar. En base a estos se puede realizar el diagnóstico, este lo podemos realizar mediante los parámetros que el DSM-V establece, este toma en cuenta: 


0- Los síntomas centrales  

0- Los síntomas asociados  

0- La generalización de los síntomas: estos tienen que estar presente todos los días  

0- La duración: un mínimo de dos semanas 

0- Los síntomas generan un impacto negativo en el funcionamiento o un malestar significativo

0- Los síntomas no son el resultado de un cuadro clínico o el efecto de una sustancia 


En base a esto se puede determinar el tipo y la gravedad del episodio y las herramientas con las que se va a enfrentar. 


Tratamientos: 


Dependiendo de la gravedad en la que se encuentre el episodio se determinará el tratamiento, en este se recomienda incluir a los padres del niño o del adolescente para que se involucren en el proceso de evaluación y recuperación con el fin de que vean los posibles tratamientos, sus ventajas y desventajas además de mejorar la relación terapéutica y con ello los resultados sean más satisfactorios.

  

Dentro de los tratamientos más comunes, se encuentra las terapias psicológicas y farmacológicas. Para la atención de depresiones leves y moderadas se suelen usar terapias psicológicas y para depresiones graves es recomendable hacer uso de las terapias farmacológicas y psicológicas. 


Las terapias psicológicas son propuestas diseñadas para el tratamiento de personas con depresión, con el fin de abordarla y poder eliminar todas esa conductas y respuestas negativas antes diversas situaciones. Las más usadas son “la terapia cognitivo-conductual" y “la terapia interpersonal”. 


Terapia cognitivo-conductual: Esta se enfoca en la modificación de estilos de pensamiento y conducta negativas ya que una disminución de los sentimientos depresivos mostraría una mejoría en el funcionamiento. Esto es porque en los adolescentes o niños que tiene depresión sus respuestas son irrealmente negativas como, por ejemplo: “No sirvo para nada”, “Nada me sale bien”, “Estarían mejor sin mi” estas formas de repuestas son lo desencadenantes además de que la mantiene. El objetivo de este tipo de terapias es crear estrategias para cambiar los pensamientos y conductas negativas por positivas y romper con el ciclo de la depresión. 


Terapia interpersonal: Esta está centrada en las relaciones interpersonales como lo son las familiares, amigos, compañeros entre otros más. Su intención es identificar los problemas que puedan surgir en estas, como la interrupción del vínculo afectivo.  


Estos dos tipos de terapia suelen estar relacionadas dado que comparten muchas cosas, una de ellas es objeto de estudio el cual es las relaciones interpersonales. Su finalidad es enseñar al adolescente a manejarlos de forma constructiva.  


Mientras que en las Terapia farmacológica se enfocan en aspectos más fisiológicos y en relación con el funcionamiento del cerebro. En esta se hace uso de los antidepresivos, los cuales son medicamentos que funcionan aumentando la actividad cerebral y de ciertas sustancias químicas conocidas como neurotransmisores, con el fin de mejorar el estado de ánimo. Pero muchos de estos en los niños o adolescentes no se recomienda porque no hacen efecto o pueden causar daños colaterales.  


Epidemiología 

Esta es un tema muy variado la cual depende del lugar, el país y la población, el periodo de tiempo en el cual se haga el estudio (semanas, meses, años), la gente de donde se recabe la información y el tipo de diagnóstico con el que se evalúe, con lo cual los datos aquí presentados pueden variar según el estudio que se vea. 
Pero en forma general la mayoría de los estudios menciona que el 1% al 2% de lo niños de edad prepubertal y cerca del 5% de adolescentes en el mundo sufren una depresión clínica significativa durante el periodo de desarrollo. Esta es la segunda enfermedad de trastornos mentales mas frecuentes en los niños y adolescentes.

Bibliografía


García, J. y Rodríguez, J. (1998) Depresión en la adolescencia: presentación de un caaso. En F.X. Méndez y D. Maciá A. (Comps.) Modificación de Conducta con Niños y Adolescentes. Madrid: Ediciones Pirámide.

Rey JM, Bella-Awusah TT, Jing L. Depresión en niños y adolescentes. (Prieto-Tagle MF, ed.). En Rey JM (ed), Manual de Salud Mental Infantil y Adolescente de la IACAPAP. Ginebra: Asociación Internacional de Psiquiatría del Niño y el Adolescente y Profesiones Afines 2017.





 

 



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